Como un refugio suave en medio del invierno, esta fragancia se abre con un toque especiado de anís estrellado, cardamomo y artemisia. Su corazón amaderado y cálido, con cedro blanco y un eco de bosques nórdicos, se envuelve en un velo de cashmere delicado. Finalmente, el fondo de sándalo, haba tonka y vainilla bourbon deja un rastro seductor, como una caricia prolongada en la memoria.
Con 170 grs y 40 horas de combustión, esta vela es un bálsamo emocional. Su efecto aromaterapéutico alivia tensiones, reconforta el alma y transforma cualquier espacio en un refugio íntimo y lleno de ternura.

• Salida: artemisia, cardamom, star anise

• Cuerpo: white cedar, nordic tree, cashmere

• Fondo: sandalwood Mysore, tonka bean, vanilla courbon